La UCR se apresta a expulsar a Myrian Prunotto, la figura del radicalismo que compartió fórmula con Llaryora y que desde el próximo 10 de diciembre será vicegobernadora. Será la primera radical en la historia que llega a esa cargo pero como compañera de un peronista.
Por ese motivo, están que arde en la UCR de Córdoba y hoy hicieron circular un comunicado oficial a través de las redes sociales que dice:
El radicalismo de Córdoba considera unánimemente que Prunotto debe ser expulsada*
La Unión Cívica Radical de la provincia de Córdoba «rechaza el circo mediático y vergonzoso» protagonizado por la Vicegobernadora electa por intermedio de Hacemos Unidos por Córdoba, Myrian Prunotto, en la mañana de hoy frente a la casa radical.
La UCR cordobesa considera que el «Tribunal de Conducta partidario posee todos los antecedentes debidamente fundamentados para que actúe en forma contundente y desafilie a Prunotto y a otros dirigentes que siguieron su camino».
La dirigente de Hacemos Unidos por Córdoba tendrá ante el tribunal de conducta la posibilidad de dar su posición cuando sea oportunamente convocada.
El radicalismo en su totalidad y unánimemente considera que Myrian Prunotto debe ser expulsada de la Unión Cívica Radical.
Así concluyó el comunicado que fue acompañado con la foto del Presidente de la UCR, Marcos Carasso, quien fuese competidor de Prunotto como vicegobernador acompañando al también peronista Luis Juez, se preguntarán ustedes ¿cuál es la diferencia? Que para la UCR el acuerdo con el Frente Cívico, el PRO, CC y otras fuerzas tiene carácter institucional avalado por el congreso partidario y otras instancias de la liturgia Radical.
Esta mañana, Prunotto se acercó hasta la Casa Radical en horario en el que debiera estar abierta, desde Canal 12 informaron:
“Tendría que estar abierta porque sino volvemos a la época de facto”, denunció Myrian Prunotto en diálogo con Noticiero Doce. Y arremetió contra Marcos Carasso, a quien lo calificó como “presidente de facto” del partido porque “se autoprorrogó el mandato”. Además, lamentó tener que “pedir permiso para entrar”.
En medio de este escándalo, insistió en que durante toda la campaña de los comicios provinciales siempre “enarboló la bandera de la UCR”. Por esta razón, solicitará que “se expidan para empezar a trabajar y defenderse de lo que se está diciendo en los medios”.
Advirtió que irá “hasta las últimas consecuencias” para defender su afiliación y consideró que la expulsión es “anticonstitucional y antidemocrática”. “A mí me legitimaron los cordobeses que me eligieron”, sentenció.
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