Un fenómeno llamado Zillertal

*Por Pablo Miranda. Foto de portada: producción de Zillertal.

En el departamento Las Colonias, ubicado en el mismo centro de la Provincia de Santa Fe, se radica la primera colonia agrícola del país con inmigrantes europeos alentados por las políticas argentinas que apuntaban a la producción agrícola y con la idea de ocupar «el desierto».

Esperanza, San Carlos, San Jerónimo Norte y Humboldt, son las cuatro colonias fundadas por inmigrantes suizos entre 1856 y 1869, datos que aporta Fernando Williams en su ensayo de (1998) sobre estas cuatro colonias suizas en Santa Fe, dicho aporte de investigación a través del Conicet destaca que «…la provincia asumió, dentro de la Confederación Argentina, un rol pionero en materia de colonización (por Colonia)».

Ricardo Foster, dueño de las tierras y empresario colonizador preveía allí la aparición de un pueblo “que podrá ser una gran ciudad”, sin embargo, debido al carácter de los inmigrantes que se afincan en San Jerónimo Norte, eso va a demorar un poco.

«San Jerónimo Norte es la única colonia que conservó de manera más definida su
carácter suizo o, deberíamos decir mejor, valesano»
. En 1872, por ejemplo el porcentaje de suizos
alcanzaba a un 90% de la población de la colonia. Se guardaron así costumbres, dialectos y religión. (Williams:1998).

A pesar del diseño de políticas de un país que alentaba las siembras, en San Jerónimo, al ser procedentes del Alto Valais, los inmigrantes continuaron con sus prácticas pastoriles que determinaron que se transformara en la cuenca lechera de importancia que es hasta nuestros días. En actualidad es de esos «pueblos grandes» donde aún se pueden dejar las bicicletas en la calle sin necesidad de candados.

Este pequeño recorrido nos lleva a manera de preámbulo al eje central de este artículo y tiene que ver con las raíces de una orquesta musical que acaba de cumplir 60 años, como se dice popularmente en el pueblo: «60 años solo tienen The Beatles, The Rollings Stones y Zillertal».

Zillertal es una orquesta que hace música para bailar, según manifiestan ellos mismos es «la auténtica música cervecera». Surgió el 20 de junio 1962 por iniciativa de Horacio «Bayo» Eberhardt, Omar Jullier, Ricardo «cardi» Eberhardt, Dionisio Eberhardt, Serafín Muller, Imeldo Salzmann, Augusto Jullier, Mario Zingerling y Telmo Franzen. El largo periplo los ha llevado a distintos escenarios cosechando amigos y vivencias, más de 50 músicos y cantantes pasaron por esta agrupación musical que además de tocar en la zona de las colonias de Santa Fe, es convocada para desplegar su arte en distintas fiestas de Argentina y en países limítrofes.

Una hermandad tácita con Villa General Belgrano.

La orquesta ha participado casi en todas las ediciones del Oktoberfest Argentina desde su aparición, sólo en los primeros dos años de la incipiente fiesta cervecera, los Zillertal no estuvieron, pero una vez que se subieron a ese escenario no pararon más, la pandemia produjo un interregno, este año 2022 habrá Oktoberfest y se aguarda que con la fuerza de esta orquesta suenen Ecos de Trompetas, la Marcha Casamiento de los Valles de Zillertal y tantos otros clásicos.

Aún caen varias lágrimas por las partidas más recientes de dos queridos integrantes, Mario Zingerling y Abel Eberhardt, y por supuesto en el recuerdo perduran aquellos que se han ido antes, también surgen anécdotas más lejanas que comprenden a la rica historia de la orquesta.

Esfuerzo de muchas personas, logros compartidos.

Es una institución con todas las letras, por la legitimidad que tienen ante su propia gente, y por la manera de manejarse – siempre con respeto- siendo una representación genuina de San Jerónimo Norte.

Por estos días se desarrollaron una serie de actividades relacionadas al 60 Aniversario.

El pasado fin de semana, fue el plato fuerte festivo, el sábado con una presentación de Zillertal junto a la Banda Municipal de Música y el film de la historia de la orquesta, trabajo de compilación de imágenes y cosecha de testimonios y edición que estuvo a cargo del hermano chileno y cineasta Daniel Miranda quien tiene una gran admiración y amistad con el grupo que naciera en las presentaciones que la orquesta realiza cada año en Malloco, en el país trasandino.

El domingo 26 de junio fue de asado, cerveza y baile para coronar este tiempo. Fue así que la formación actual estuvo acompañada en sus ejecuciones por los fundadores: Augusto en la tuba y Telmo en el clarinete. Marilyn y Evelin Rey Oggier acompañaron con sus voces, se sumó Choni interpretando Jodler junto a la impronta de Héctor que agrega a su voz, carisma y agite al servicio del disfrute.

Reconocimientos

El trabajo en equipo trasciende la faceta estrictamente musical, los amigos y amigas, seguidores, ponen su grano de arena, en un sentido colectivo, cooperativo, con vocación de servicio.

Zillertal recibió el reconocimiento a distintas esferas y escalas institucionales santafesinas, a nivel municipal, departamental, y provincial, tanto desde los ejecutivos como de los cuerpos deliberativos.

Así como manifiesto que Zillertal trasciende lo musical, también miro en retrospectiva, haciendo el intento de desmadejar las historias que han hecho posible que esa idea de hacer música haya trascendido más allá de lo impensado, y tal vez, solo tal vez, rumeando una idea, mucho tenga que ver el origen de San Jerónimo Norte, creciente ante la adversidad, encontrando soluciones ante los imprevistos y a contra marcha de lo planificado por el poder político de la segunda parte del siglo XIX, supo darle junto a otros pueblos de la región la impronta lechera y quesera de importancia al país.

Algo que aprendí rápidamente en mi reciente visita, que traen consigo, la orquesta y vecinos/as: la puntualidad Suiza; el sincretismo, la suma e incorporación de otras músicas a lo típico (jazz, tango, carnaval, etc, etc.) le dan toque propio, diferente, me arriesgo a decir un tanto sui géneris, como única en su especie.

El fenómeno se llama Zillertal y brindo para que sean muchas décadas más de auténtica música cervecera.

Se escuchó por allí y tal vez se haga grafitti: Zillertal no es de nadie, es del pueblo.

*Editor Caminante Digital.

Aportes: El artículo se ve enriquecido con hipertextualidad digital, producto de otras elaboraciones documentales de foto, video, clip para redes e imágenes debidamente citadas.